Otra chocolatina de Cadbury, en este caso muy curiosa, aunque no por serlo significa que sea una chocolatina excelente.
En las anteriores ocasiones hemos viso chocolatinas con barquillo de galleta, caramelo, miel… pues en esta ocasión lo que contiene en su interior es una mezcla de cereales crujientes en la base y recubierto con una especie de nube (las típicas nubes rosas que en los EEUU se conoce como Marshmallows, aunque también se pueden llamar malvaviscos, esponjas, etc.). Todo ello a su vez cubierto de chocolate con leche.
La verdad es que es una mezcla rara en cuanto la muerdes, ya que su intención la cumple a la perfección, ya que es crujiente por un lado y suave y esponjoso por otro. Ahora, lo que al sabor se refiere no introduce tantos cambios, ya que el sabor que el proporciona la esponja o nube es muy dulce y resta el sabor al chocolate.
En definitiva, no me entusiasmó esa mezcla, ya que se hace chiclosa en la boca y pierde para mi el nivel más básico de una chocolatina: que sepa a chocolate.
Por curiosidad diré que el nombre le viene de los autobuses de dos plantas ingleses, que se llaman igual: Double Decker.
Lo mejor: que cumple con su intención, el dotar de una textura diferente a la chocolatina.
Lo peor: que no cumple con lo que es: no sabe apenas a chocolate.
a mi me gusta muuuuucho
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