Brownie de Carrerour




    Cuando hablamos de Brownie, rápidamente acudimos al inglés para darle un significado que en esta ocasión está íntimamente relacionado con el producto. Sí, Brownie se puede traducir como "Marroncito", y se le designa así a un bizcocho de chocolate, normalmente presentado en pequeñas porciones, típico en la dieta de los americanos. Incluso se hablan de leyendas que afirman que el Brownie fue inventado por error cuando un cocinero olvidó echarle levadura a un bizcocho... pero como todo... las leyendas pueden llegar a ser más conocidas que el propio origen de las cosas.

Es muy difícil igualar la exquisitez y el dulzor propios de un auténtico brownie. Desde hace mucho tiempo he venido probando diferentes fórmulas que afirmaban tener la receta perfecta para una masa de bizcocho perfectamente chocolateada y en su punto... pero que bajo mi punto de vista no eran más que fracasos. En esta ocasión presento el ejemplo de esta receta, materializada por Carrefour dentro de sus marcas blancas.

Para que un brownie pueda llegar a convencernos, lo primero que debe conseguir es sorprendernos con la combinación de sus ingredientes... todo ha de estar perfectamente medido y "sincronizado", ya que se trata de un producto que carece de levadura, y por lo tanto muy difícilmente podrá conseguir la esponjosidad dotada a un buen brownie.

Comenzamos con un análisis a la portada. En la ilustración se nos presentan las porciones de brownie, una encima de otra, a tamaño completo, y de fondo una pequeña onza de chocolate. En el interior del paquete nos vienen ocho bolsitas individuales con una porción del dulce en cada una de ellas. Ya de por sí el color alentaba a sugerir que presentaba la esponjosidad que requiere un brownie, pero en un principio se trata de algo a simple vista.

Cuando lo sacamos de su bolsa transparente podemos apreciar que la masa no es para nada aceitosa ni grasienta, al contrario, resulta ser rasposa al tacto y algo más consistente en la capa superficial del dulce. En el momento en que se aprieta ligeramente con los dedos, conseguimos modificar su forma original. Pero lo más importante llega con el primer bocado.



La sensación fue bastante agradable, a pesar de que sentía cierto rechazo a pensar que me iba a resultar tan placentero al sabor. Conforme la masa se iba derritiendo en la boca se iban liberando los pequeños, y escasos, trozos de chocolate en su interior, junto a un aroma embriagador y algo potente de avellana mezclado con nueces... en definitiva, me sorprendió gratamente al descubrir que se trataba de una exquisitez de dulce, imitación de un brownie.



Aunque no lo llegué a hacer, es cuestión de probar a darle un pequeño calentón en un microondas, y probar la sensación de un brownie recién calentado.

En cuanto a sus componentes energéticos, Brownie de Carrefour contiene 136 kcal por cada porción individual; y se aprecia un 11% en grasas e hidratos de carbono.

Lo mejor: Un sabor muy apetecible, buena presentación, buena relación calidad/precio.

Lo peor: No apto para personas alérgicas a frutos secos (como son las nueces por ejemplo), demasiadas calorías por unidad.
Comparte en Google Plus
Instagram

Sobre Álvaro Torrejón Puente

Lo mejor de comer es probar cosas nuevas... y ¡que te gusten!
    Comentarios en Blogger
    Comentarios en Facebook

0 comentarios:

Publicar un comentario